Mise en Abyme, una visión nueva

9 03 2010

Mise en Abyme es una expresión francesa que se usa en literatura para hacer referencia a narración imbricada, es decir superpuestas, como si de unas matrioskas se trataran, una dentro de otra y así hasta el infinito. Esto lo ha querido trasladar Aurélia de Angelis a la fotografía para representar lo que para ella significa el Centro Sociocultural La Cova de les Cultures, en pleno barrio de Gracia, un lugar que visita con frecuencia ya sea para ver obras de teatro, conciertos o exposiciones.

Esta obra supone la primera exposición individual de la joven fotógrafa belga. Mise en Abyme llenó el recinto de La Cova de les Cultures el día de su inauguración, el 4 de marzo, y estará expuesta hasta el día 27 de marzo. Una obra original, que se aleja de la linealidad de las exposiciones tradicionales y de la que De Angelis confiesa que huye intencionadamente. Así, las fotografías las encontraremos al nivel en el que estarían si los objetos que visualizamos dentro de la foto estuvieran realmente allí. Por eso nos encontramos la fotografía de un felpudo a la entrada del local, en el suelo. A cada lado veremos la fotografía de los timbres de un edificio y un buzón viejo. Ya dentro veremos personas, fotografías dentro de fotografías, mesas y sofás, un espacio dentro de un espacio, de eso se trata precisamente Mise en Abyme.

Qué: Mise en Abyme

Quién: Aurélia de Angelis

Cuándo: hasta el 27 de marzo

Dónde: La Cova de les Cultures, carrer de l’àngel, 12

Cuánto: Gratis

Ana Sánchez





Aurélia de Angelis se imagina el futuro

9 03 2010

El día 4 de marzo Aurélia de Angelis (Liège, 1981) se estrenaba como artista en solitario en el mundo de la fotografía: inauguraba su obra Mise en Abyme y aprovechamos para hablar con ella de sus inicios, la exposición, el mundo de la fotografía y su visión de futuro:

¿Como te ves en el futuro, seguirás haciendo foto?

Sí, me gustaría encontrar un mecenas… (risas)

Sí, sí, pero quien paga manda…

Hay gente que se dedica a buscar artistas, para que el artista pueda desarrollarse. Pero eso es un chollo.

¿Y a nivel de concursos o becas hay alguna que te guste especialmente?

Hay concursos muy importantes, pero yo mandé a concursos aquí y te sale muy caro para respetar las normas y luego te devuelven las imágenes y no te dicen por qué no la han seleccionado. Yo quiero saber, tener un eco de por qué no gustó: ¿la rechazaron a primera vista o se lo pensaron?

¿Haces autocrítica o comentas con los amigos?

Sí, les enseño las fotos a los amigos, pero no escucho. Antes en la escuela los profesores me influenciaban mucho y al final no hacía lo que quería. Un amigo me dijo “Aurélia, no escuches a nadie y haz tus proyectos sola” y pensé que era verdad, no tenía que pedir la opinión a todo el mundo. Al final la decisión la tienes que tomar tú.

Claro, al fin y al cabo la fotografía es algo muy personal. En cuestión de cámaras te quedas con Nikon o Canon?

Me gustan los colores de las fotos de Canon pero la Nikon hace ese sonido de cámara antigua al disparar que me encanta. Estuve a punto de comprarme una Nikon hace tiempo.

¿Lo hiciste?

No, siempre he tenido Canon. Desde la que me regalaron para mi comunión pasando a la antigua cámara Canon de mi abuelo.

¿Era fotógrafo?

En realidad no, pero en mi familia materna todos son artistas. Hay músicos, escultores, pintores, etc. Pero sólo en mi familia materna.





Aurélia de Angelis nos habla de fotografía

9 03 2010

El día 4 de marzo Aurélia de Angelis (Liège, 1981) se estrenaba como artista en solitario en el mundo de la fotografía: inauguraba su obra Mise en Abyme y aprovechamos para hablar con ella de sus inicios, la exposición, el mundo de la fotografía y su visión de futuro:

Antes nos has comentado que te gustaría vivir de la fotografía pero sin tener que hacer fotos de bodas. ¿Prefieres ser fiel a tus principios antes que ganar dinero?

Sí, cuando trabajaba con el fotógrafo que hacía fotos para periódicos, trabajaba todo el día con la cámara o el ordenador. Todo el día pensando en foto y al volver a casa no tenía ganas de hacer cosas personales.

¿Cuando haces este tipo de fotografía artística. Como es el proceso de pensar y hacer las fotos?

Llevo siempre la cámara conmigo y las saco cuando veo algo que me gusta. No tengo nada en mente.

¿Alguna preferencia?

Un poco todo. Antes sólo hacía retratos. Desde hace un año, que hice un curso en la escuela Massana, con la intención de cambiar y no tener tantas reglas y salir un poco de lo que hacía y empecé a hacer foto de todo. Interiores, paisajes… un poco de todo.

¿Cómo se enseña la fotografía en las escuelas?

Depende de las escuelas. La persona que quiera estudiar fotografía tiene que mirar el programa del curso. Hay cosas muy enfocadas a la cámara en sí, cómo funciona, cosas más técnicas y hay otras escuelas que sólo tienes que pensar y reflexionar sobre la fotografía pero no te enseñan nada de técnica. Es a elección de cada uno. Eso de que es mejor se autodidacta…creo que la escuela es un apoyo y tú tienes que coger el vuelo.

¿Qué consejo le darías a alguien que se quiere dedicar a la fotografía?

El tema de los concursos está bien. Hay muchos. No sé, es complicado. Es tener contactos. Pero inviertes un montón de dinero. Vendes una o dos fotos. Todo el trabajo que dedicaste… es un poco deprimente al final.

¿Alguna vez has pensado en dejarlo?

No, pero a veces pienso que con el dinero que me gasto podría irme de viaje 2 meses a Tailandia. Realmente lo hago por amor al arte, para tener un resultado, enseñarles a mis amigos mi trabajo…





Aurélia de Angelis nos habla de su exposición en La Cova de les Cultures

9 03 2010

El día 4 de marzo Aurélia de Angelis (Liège, 1981) se estrenaba como artista en solitario en el mundo de la fotografía: inauguraba su obra Mise en Abyme y aprovechamos para hablar con ella de sus inicios, la exposición, el mundo de la fotografía y su visión de futuro:

¿Como surgió la idea de hacer esta exposición?

Es un sitio que conozco muy bien. Estoy aquí casi cada semana para ver alguna obra de teatro, algún concierto. Me siento a gusto y quería reflejar mi visión del sitio.

El nombre es Mise en Abyme, según tengo entendido hace referencia a una imagen que se repite hasta el infinito…

Exactamente, todo es un reflejo de un espacio dentro de otro.

¿Qué tal te está yendo la exposición?

Tuve buenas críticas y bien. Vino mucha gente a la inauguración, demasiada (risas).

¿Por qué las fotos no tienen una leyenda que las explique?

Son fotos muy personales. La de la niña, por ejemplo, es mi prima el día del entierro de mi abuelo y estaba tan triste… Hay otra en la que se ve una fotografía antigua de la madre de esta niña y también en otra foto se ve una imagen de mi padre cuando era bebé. Son tan personales que prefiero no poner nada.

¿Es difícil exponer algo tan íntimo?

Sí, al principio sientes que te estás desnudando pero luego piensas que las personas que vean la foto nunca van a adivinar que la niña de la foto es mi prima en el funeral de mi abuelo y te relajas.

Te afectan más las críticas a fotos tan personales como esas?

No, las críticas son relativas a la fotografía en si, no a lo personal que hay en ella.

Crees que Barcelona es una buena ciudad para darte a conocer?

Darte a conocer quizás sí. Pero luego está el tema de las ventas. Creo que somos muchos jóvenes, hay muchos artistas en esta ciudad. Hay una onda muy creativa pero no llega a un resultado concreto. Barcelona no aprovecha del todo su potencial

¿Hasta qué punto son importantes son los contactos? ¿Tienes en mente algún proyecto para abrirte camino?

Yo ahora lo que voy a hacer es irme a las galerías, la librería kowasa de fotografía… y enseñar algún dossier con mis imágenes a ver qué me dicen, pero no sé cómo funciona. Sólo he expuesto aquí y en Granollers.

¿Una exposición colectiva te exige ceñirte a un patrón? ¿ Cómo son?

Depende. Son más guiadas. Pero lo mejor es que compartes tus ideas con otra persona y tenéis que encontrar un mismo camino.

¿Prefieres hacer fotografía tú sola?

Sí, aunque también busco proyectos de colaboración. Tengo amigos dj’s y les hago proyecciones en bares o discotecas.

¿Conoces a otros artistas que también estén empezando? ¿Compartís el mismo punto de vista?

Sí, ninguno vive de la fotografía. Es una afición que no trae dinero sino que te cuesta mucho dinero.

¿Sueles ir a las demás exposiciones de fotografía que se hacen en Barcelona?

No todas, pero me interesa.

¿Y crees que el nivel es bueno?

Me parecen muy aburridas. Siguen una línea muy clásica. No me divierto. Como espectadora soy muy pasiva. Por eso yo intenté montarla de modo diferente.

¿Qué echas en falta?

Habría que lanzarse y proponer algo diferente. No porque sea una galería tiene que estar en un marco y en un paspartú determinado.

Crees que se tendrían que arriesgar?

Sí. Aunque también me gusta lo convencional.

¿Qué propones?

Hace unos meses hice un evento con amigos y fotocopié fotos en b&w y empapelé todo un piso (servicios incluidos) y dejé bolis y rotuladores y la gente iba apuntando y dibujando sobre las fotos. Todo el mundo se divertía. Tenía ese lado de “lo prohibido” de tocar una imagen. Esas cosas que hacen participar al espectador…

¿Qué tipo de interacción podría haber en una exposición fotográfica?

Hacer videos y que la gente tenga un cierto papel al estar frente al proyector, lo de las fotocopias… Siempre hay maneras de hacer participar. Hay que buscarlas.





Aurélia de Angelis nos cuenta cómo empezó

9 03 2010

El día 4 de marzo Aurélia de Angelis (Liège, 1981) se estrenaba como artista en solitario en el mundo de la fotografía: inauguraba su obra Mise en Abyme y aprovechamos para hablar con ella de sus inicios, la exposición, el mundo de la fotografía y su visión de futuro:

¿Cómo empezaste?

Empecé con la fotografía muy joven. A los 12 pedí como regalo de comunión una cámara de fotos y a los 18 hice una escuela multidisciplinaria artística y tocaba un poco de todo. Luego me dediqué solo a la imagen: video y fotografía.

¿Cuándo te viniste a Barcelona?

Hace 5 años. Quería probar suerte como fotógrafa en Barcelona.

¿Y que tal?

Fatal.

¿Por qué?

Hacía fotografía comercial y no era lo mío. Me costaba bastante verlo como un producto y no como medio artístico.

¿Qué te hizo emigrar?

Vine por amor. ¿Qué bonito, no? Resultó ser una historia no muy romántica, en realidad.

Pero te quedaste…

Sí, porque vinieron muchos amigos de Bélgica a vivir aquí y también hice amigos nuevos, me gusta mi trabajo y me lo paso muy bien en Barcelona así que decidí quedarme.

¿A qué te dedicas?

Soy profesora de francés. Hice unas prácticas en la Alliance Française para poder dar clases.

¿Te gustaría llegar a poder vivir de la fotografía?

Sí, pero sin hacer fotos de bodas…

¿Qué tipo de fotografía te gusta?

Me gusta la fotografía puramente artística, que no tenga otro objetivo. Sí que es interesante la fotografía documental, no lo niego. Pero a mí me gusta la fotografía artística.

¿Y en Bélgica te dedicaste?

Estaba estudiando y era jovencita. No se puede comparar.

¿Cómo ves el nivel de competencia aquí respecto a Bélgica?

Depende de como uno se mueve. Yo allí participaba en concursos y me movía más en el mundo de la fotografía y las exposiciones. Aquí hay muchos lugares pero no hay el mismo nivel de calidad creo.

¿Hay más oportunidades que en Bélgica?

No te sabría decir…

¿En Bélgica expusiste?

Sí, pero siempre fueron exposiciones colectivas.

Ana Sánchez





Aurélia de Angelis, fotógrafa belga afincada en Barcelona

9 03 2010

Vino por amor. El amor se fue y ella se quedó. Aurélia de Angelis (Liège, 1981) aterrizó en Barcelona hace ya cinco años procedente de su Bélgica natal y no se arrepiente. Aunque nos cuenta que en Barcelona resulta muy difícil sobresalir de la enorme cantidad de artistas que hay, afirma que le gusta la ciudad, le gusta su trabajo de profesora de francés y se encuentra agusto. Y es que la casualidad ha querido que muchos amigos belgas se hayan trasladado, igual que ella, a la ciudad condal.

Después de un lustro pululando por las salas y espacios de exposiciones del area metropolitana de Barcelona, por fin afronta su primer trabajo en solitario. La Cova de les Cultures se encontraba a rebosar de gente el día de la inaugurarción, de hecho «demasiada gente», admite entre risas. Su exposición, Mise en Abyme, un término literario francés que ella toma presetado para hacer referencia a una imagen que se repite hasta el infinito. La exposición, que podrá verse hasta el 27 de marzo, es un reflejo de lo que para ella significa el espacio de La Cova de les Cultures, lugar que frecuenta por obras de teatro, conciertos o exposiciones. Esperemos que este sea el inicio de una prometedora carrera dentro de la fotografía, eso sí, le gustaría vivir de la fotografía «pero sin tener que hacer fotos de boda…». Queda dicho.

Qué: Mise en Abyme

Quién: Aurélia de Angelis

Dónde: Cova de les Cultures, carrer de l’Àngel, 12

Cuándo: 27 de marzo de 2010

Cuánto: Gratis

Ana Sánchez





Un café con Jordi Cotrina

4 03 2010

Jordi Cotrina durante la entrevista / Ana Gónzalez

 

No cabe duda de que el nombre de Jordi Cotrina goza de gran popularidad en nuestro país. Sin embargo, su rostro no es tan conocido. Y es que su trabajo le obliga a esconderlo detrás de las cámaras. Pero, entre risas, nos confiesa que es en ese lugar donde se siente más cómodo e, incluso, reconoce que siente cierto respeto al ponerse delante de nuestro objetivo. Un lugar al que, como él mismo admite, quizás ha llegado por azar. Por casualidad o no, lo cierto es que Jordi Cotrina es una de esas personas que tiene la suerte de dedicarse a su mayor afición: la fotografía. 

Sus inicios en este mundo se remontan a su adolescencia, cuando descubrió la cámara de su padre y empezó a fotografiar partidos de tenis, deporte que él mismo practicaba. Poco a poco, se fue labrando un camino en el ámbito de la fotografía deportiva, que finalmente le condujo a las puertas de algunos de los diarios más reconocidos de nuestro país, como El Mundo Deportivo, La Vanguardia o El Periódico, donde ejerce desde 1998. Unas puertas que le dieron paso a convertirse en la sombra del FC Barcelona, retratando épocas como la del Dream Team. E incluso le permitieron fotografiar en cuatro ocasiones lo que él mismo define como el punto más álgido de cualquier evento deportivo: los Juegos Olímpicos. Pero su historia no acaba aquí. Con miles de fotografías tomadas, Cotrina todavía tiene muchos sueños que cumplir y planes de futuro. En esta entrevista, además, nos desvelará cómo se las arregla para congelar el momento decisivo, reflexionará sobre la ética del fotógrafo y hará una valoración de la profesión. 

En definitiva, os invitamos a que visitéis nuestro blog en los próximos días para conocer algunas pinceladas de la vida profesional de Jordi Cotrina.  

 Mireia Sánchez





Entrevista a Jordi Cotrina: valoraciones

4 03 2010

«El futuro del periodismo está por parir»

¿Cuál es la mayor satisfacción de esta profesión?

Yo creo que se disfruta mucho, es apasionante. Y se vive mucho, es decir, vives mucho el hecho de intentar transmitir cosas que estás fotografiando en los eventos, vives mucho con la gente con la que trabajas. Entonces al final tienes muchas experiencias de muchas situaciones y es muy gratificante.

 ¿Alguna vez imaginaste que ibas a llegar tan lejos?

Nunca ha estado premeditado esto de dedicarme a la fotografía. Empiezas por afición. Yo daba clases de tenis y con eso me pagaba las cámaras. Me fui al torneo de Montecarlo porque conseguí una acreditación a través de la revista e invertí mucho dinero en ir a ver el torneo y decidí hacer fotos a los tenistas. Después pensé que podía tratar de utilizar el material. Me presenté en el Mundo Deportivo y resultó que el director había sido en su día redactor de tenis. Fue una suerte. Le gustó el material y me compraron las fotografías.

 ¿Cómo ves el futuro del fotoperiodismo?

Quiero ser optimista. Creo que el papel no desaparecerá aunque sí que será diferente. ¿Cómo de diferente? No lo sé, yo creo que no lo sabe nadie. Por eso todo está como en stand by. Y estás metido en la marea negativa económica porque nadie sabe cómo será el modelo siguiente. El futuro está por parir, alguien tendrá que aportar las imágenes.





Entrevista a Jordi Cotrina: sueños

4 03 2010

«Sería genial poder elegir todos los eventos deportivos que quisiera cubrir durante un año»

¿Hay algún personaje que te gustaría fotografiar en un futuro?

 Ahora mismo no me viene a la cabeza ninguno… Hay muchos. Me gusta mucho hacer retratos de deportistas.

Y, ¿algún evento deportivo?

Por ejemplo, de eventos me gustaría fotografiar las carreras de caballos en la nieve por los Países Escandinavos o el Gran National en Inglaterra. Si no se pasara tanto frío, los Juegos de invierno también.

Luego, por ejemplo, hay un fotógrafo de Sports Illustrated, Neil Leifer, que como regalo de jubilación le concedieron hacer durante un año los eventos que quisiera. Al final editaron un libro. Eso es lo que quiero que me pase algún día; “¿En enero que quiero hacer? Los saltos de trampolín de tal sitio. ¿En febrero? Un partido en España. ¿En marzo? Carreras de galgos en Massachussets…”. Sería genial, ¿no?

Y por ejemplo, he hecho mucho tenis pero nunca el Open Usa o el de Australia  y me gustaría porque hay mucho contraste con la luz, una luz muy dorada, fondos negros, las fotografías son muy bonitas, diferentes a las que puedes hacer en el Godó o en el Roland Garros (bueno, está muy bien si sobrevives porque cuando salen las temperaturas de 50º…)





Entrevista a Jordi Cotrina: los Juegos Olímpicos

4 03 2010

«Los JJOO son un evento muy divertido, pero inabarcable para un fotógrafo»

¿Qué acontecimiento te gustaría fotografiar?

 Muchas cosas. De momento me gustaría seguir haciendo los Juegos Olímpicos; Londres, Brasil…

 ¿Todavía no sabes si irás a Londres 2012?

No. Los diarios cada vez recortan más y además el volumen de fotografías que mandan de agencias es enorme. Cuando yo mando mis fotos me pueden decir “tenemos ya 2000 fotografías de la inauguración”. Claro, en un momento en que los diarios van a reducir gastos… Lo que tienes que buscar cuando vas a esos sitios es hacer cosas diferentes, moverte. Pero es difícil, porque cada vez hay menos libertad de movimiento. La solución seria dar un punto de vista diferente que al final es lo que personaliza al diario.

 ¿Cómo fue la experiencia en los JJOO de Barcelona ‘92?

Pues todos los diarios tenían suplementos y yo todavía colaboraba con la revista de tenis, así que casi siempre pedía hacer la competición de tenis. Aunque alguna vez me decían que fuera a hacer waterpolo o atletismo o una entrevista a Indurain. Pero no era la dinámica general. Recuerdo cosas interesantes pero no intensamente. Más adelante me he ido divirtiendo más. Es divertido, pero inabarcable. Tienes que ir escogiendo. Es importante planificar qué vas a ver.